LA MADRE DEL PAPA FRANCISCO
El llamado a la yihad católica o el 11S de Bergoglio
"El fanático es incorruptible: tanto si mata por una idea o si es asesinado por una; en ambos casos, tirano o mártir, es un monstruo". -- Isaac Asimov
El atentado contra Charlie Hebdo no se reduce a la muerte de 12 personas a manos de terroristas musulmanes, Charlie Hebdo es el símbolo mediático más reciente de las masacres perpetradas por las religiones a lo largo de la historia.
El atentado contra Charlie Hebdo, por tanto, no ha terminado. Personas comunes y líderes políticos y religiosos todavía se regodean, incansables, en la sangre que cubre a la humanidad.
El papa Francisco es uno de ellos. En una de sus declaraciones, Bergoglio, condenó el atentado, pero —y ese 'pero' siempre es importante— resaltó que la libertad de expresión tiene límites y uno de ellos es el respeto a la religión. Hasta ahí, nada que no se esperara de él. Pero —otra vez el 'pero'— también colocó un ejemplo: si su madre fuera insultada, él respondería con un golpe.
¿Quién es la madre del Papa?
La madre iglesia - el 11s de bergoglio
Muchos creyentes y ateos podrían haberse sentido identificados con él: el insulto a la madre generalmente suscita ira y violencia. Sin embargo, este ejemplo no es inocente para quienes conocemos la ideología cristiana (en este enlace, el documento completo de la audiencia del 11S del 2013). Bergoglio no hablaba de su madre biológica solamente, incluso podría decirse que su madre biológica participaba muy poco de esa imagen. Él se refería a la Iglesia Católica. He ahí el problema y la gravedad de su declaración: es incitación a la violencia.
Los católicos que tienen una fe formada férreamente saben que el Papa hablaba de la Iglesia: han identificado tanto la función maternal con la de la Iglesia que ya no pueden separarlas. Su fe se ha materializado. La Iglesia es, para ellos, incluso una madre que está por encima de la que los crió, por eso es que no soportan ningún cuestionamiento o burla hacia ella.
Bergoglio está bien asesorado, no fue un lapsus, no fue producto de la rabia que para muchos desataría la imagen de una madre natural insultada. Él se refería a la blasfemia —que es peligrosa para cualquier religión— porque desacraliza por medio de la burla y la burla es el antónimo perfecto del miedo.
La Iglesia ha combatido sanguinariamente la blasfemia durante la Inquisición, sin embargo ahora ya no tiene el poder de matar y quedar impune (tan “solo” le queda el poder de violar niños impunemente). La blasfemia se ha salido de control. Las redes sociales han permitido que se multiplique y sus efectos desacralizadores ya pueden percibirse en la población.
Justificar un puñetazo es exacerbar los ánimos al extremo de desatar la violencia que puede ir desde un enfrentamiento verbal a un golpe o un nuevo asesinato.
La declaración del Papa es un llamado a la yihad católica -o dicho en términos más acordes con el catolicismo-, a una cruzada más.
Bergoglio sabe lo que hace, y los extremistas islámicos han entendido el mensaje: es un aliado más.
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Algunos enlaces sobre la "madre Iglesia" a documentos del Vaticano y de la Iglesia española.
- PAPA FRANCISCO (AUDIENCIA GENERAL - Plaza de San Pedro - Miércoles 3 de septiembre de 2014).
- Documento para catequistas. España.
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