Si realizáramos una encuesta en los países latinoamericanos sobre lo que la gente sabe de la evolución quedaríamos asombrados. Basta conversar para darnos cuenta de que casi nadie sabe lo que es la evolución. De Darwin no han escuchado jamás. 

Los medianamente informados tienen respuestas alucinantes. Dicen, por ejemplo, que la evolución es “solo” una teoría y la equiparan con la creación. También suelen responder que es falsa porque no vemos a monos tener seres humanos o porque no vemos que ningún animal se convierta en otro.

No me detendré en el motivo de tanta falta de información, solo mencionaré uno: el Concordato (un tratado firmado entre nuestros países y el Vaticano mediante el cual se le otorgan innumerables prerrogativas, entre ellas, decidir sobre lo que se enseña en los colegios). Me importa más explicar en qué consiste la evolución, qué implicancias tiene y por qué surge la idea de conmemorar el día del Orgullo Primate.

¿QUÉ ES LA EVOLUCIÓN? 

Es un proceso que ha durado millones de años y continúa. Los seres vivos descendemos de un ancestro común que se reprodujo y cuyas sus “crías” se vieron sometidas a distintos cambios en el medio ambiente y a variaciones genéticas (mutaciones). Cuando las mutaciones resultaron favorables para su supervivencia en un contexto, los seres sobrevivieron, y cuando no, murieron.

Pongamos un ejemplo. Digamos que un ave pone dos huevos. Una de las crías, como su madre, puede soportar entre 10° y 30° de temperatura y la otra, por mutación genética, soporta entre 5° y 20°. Ahora imaginemos que la temperatura de su hábitat baja hasta 5°. Pues bien, la cría sin mutación morirá y no podrá reproducirse, pero la mutante sí se reproducirá.  

No quiere decir que sobreviva la más fuerte, sino la que, por azar, está mejor adaptada. Si no hubiese descendido la temperatura y se hubiese mantenido en 25°, la mutante habría muerto sin dejar crías.

Un pequeño cambio no implica el nacimiento de una nueva especie, pero como los descendientes de la cría mutante continúan mutando (las mutaciones se dan en todos los individuos de todas las especies), y estos cambios son favorecidos por el contexto, lenta, muy lentamente se genera una nueva especie. Obviamente esto puede tardar miles y miles de años.

Charles Darwin fue quien descubrió este proceso y la ciencia ya lo ha comprobado gracias a los fósiles, la anatomía comparada, el desarrollo embrionario y la genética. Así, el homo sapiens (nosotros), los chimpancés y los bonobos compartimos el 98% de nuestra carga genética.

¿POR QUÉ LOS MONOS NO TIENEN HUMANITOS SINO MONITOS? 

No es que los humanos descendamos de los monos, sino que tenemos un ancestro común. Para que se entienda mejor: ellos serían nuestros “primos”, es decir, compartiríamos los mismos “abuelos”. Por eso no debemos esperar que de un mono nazca un humano.

Hay un video que grafica muy bien esta confusión, pero a la vez evidencia el maltrato infantil y la desinformación que someten a algunos niños, se los recomiendo. También les dejo otro video de la evolución diseñado para niños.

¿POR QUÉ NO VEMOS QUE OTROS ANIMALES EVOLUCIONEN? 

Cuando los cambios del entorno son naturales y muy radicales, y el ciclo vital es más largo, los cambios son más lentos.

Pero se han verificado cambios sustanciales en especies que tienen un periodo de vida mucho más corto que el nuestro. Por ejemplo de las mariposas del abedul  o de zorros.

LA EVOLUCIÓN ES SOLO UNA TEORÍA IGUAL QUE LA CREACIÓN

Esta confusión nace del desconocimiento que el término ‘teoría’ significa en la ciencia.

Las personas comúnmente usamos ‘teoría’ como sinónimo de ‘hipótesis’, es decir, algo que no ha sido probado. Sin embargo, en el ámbito científico, una teoría es una explicación ya comprobada.

En ese sentido, la creación no está ni remotamente a la altura. Es más, la creación bíblica es un mito que es refutado completamente por la evolución. Los seres vivos no fueron creados, no aparecieron tal como ahora los vemos. Los seres vivos de hace 1000 000 años eran distintos a los que vemos hoy y a los que existirán dentro de 1000 000 años.

Por lo tanto, creación y evolución no son equiparables. Tampoco son dos maneras válidas de ver la vida. Una es un mito, es decir, es falsa y la otra está comprobada, es decir, es cierta.

¿POR QUÉ ES NECESARIO ENSEÑAR LA EVOLUCIÓN EN EL COLEGIO?

Porque los niños no se enfrentarán a un mundo imaginario. Viven en un mundo rodeado de ciencia y desconocerla equivale a la ignorancia. ¿Por qué condenar a los niños a la ignorancia? Por otra parte, los conocimientos científicos ayudan a resolver problemas sobre una base real, o dicho en otras palabras, ayudan a madurar.

La educación de los niños es responsabilidad del Estado. Sin embargo, en muchos países latinoamericanos todavía la religión decide qué, cómo y quién enseña.

¿ENTONCES DEBE PROHIBIRSE LA ENSEÑANZA DE LA CREACIÓN?

Según mi criterio, si los padres lo desean, sus hijos pueden recibir adoctrinamiento sobre la creación, pero no en los colegios. El adoctrinamiento debe darse en sus propias iglesias, mezquitas, templos, etc.

Cuando se adoctrina a un niño en un colegio estatal se está usando los impuestos de todos para inculcar conocimientos falsos. Lo que sucederá (como en el caso lamentable del Perú) es que la calidad de la educación será subestándar. Pero, repito, los padres pueden adoctrinar a sus hijos si lo desean, aunque para mí eso linde con el maltrato infantil.

¿POR QUÉ SE CONMEMORA EL DÍA DEL ORGULLO PRIMATE?

Debido a la pobre información que los niños reciben en los colegios sobre este tema, muchos adultos no tienen la más mínima idea de los planteamientos básicos de la evolución. Conmemorar este día es difundir un conocimiento científico. También permite poner sobre la mesa los riesgos y peligros de que la religión influya en nuestro sistema educativo.

ESTADO LAICO Y EDUCACIÓN

En un Estado Laico, todas las religiones tienen cabida mientras no se les ocurra matar personas e imponer al Estado su modo de vida mediante leyes e influencias políticas. Y lo que es mejor, los impuestos de todos no sostendrán las creencias de otros, incluso en contra de los intereses del país, como ahora sucede en el Perú.

Cipriani (arzobispo peruano) no es el problema. Si fuera despedido, ocuparía su lugar otra persona que recibiría las mismas directrices desde Roma. Tal vez sería más carismático, menos torpe y un poco más inteligente ―lo que me recuerda al actual papa―, pero los resultados serían los mismos.

Lo que el Perú y otros países latinoamericanos necesitan es la anulación del Concordato y la separación fáctica entre el Estado y las religiones, de lo contrario, la educación, la salud y las leyes en general seguirán siendo sometidas al tamiz de las creencias.